A las 5 y 30 de la tarde en la Catedral de Puerto Ayacucho se estará llevando a cabo la Misa de Exequias del Hermano Coadjutor Salesiano JUAN FINKERS, presidida por Monseñor Jonny Eduardo Reyes Sequera, en presencia de las cenizas traidas al Estado Amazonas para dar cumplimiento a su deseo personal que sus cenizas fuesen traidas a la región a la cual sirvió y amó con intensidad.
JUAN FINKERS falleció en Caracas el 29 de abril pasado (2017), a la
edad de 91 años . Había nacido en el poblado de Almelo-Utrech-HOLANDA,
el 4 de mayo de 1925. Hijo de la unión de Anne y Wilhelm Finkers y
bautizado el mismo día de su nacimiento.
Había ingresado a la Congregación Salesiana el 15 de agosto de 1943 en el Noviciado de Ogchelen (Holanda). Allí mismo hizo su primera profesión el 16 de agosto de 1944 y permeneció allí por diez años, hasta 1954 y luego pasó a Assel (Holanda) hasta 1963 cuando vino a Venezuela, directamente a la Isla de Ratón (hoy El Carmen de Ratón) capital del Municipio Autana donde permeneción desde septiembre de 1963 hasta 1971.
Luego vino una etapa muy especial de su vida, su servicio a los yanomami en el Alto Orinoco, en el antiguo Territorio Federal Amazonas y que luego en 1992 pasó a ser el Estado Amazonas.Entre los yanomami estuvo de 1971 hasta el 2008. Durante 37 años vivió con intensidad su servicio como educador, comunicador de la fe e investigador. Escribió un libro sobre la alimentación yanomami, lo cual ha sido una contribución a la generación de conocimientos sobre los pueblos indígenas de nuestra región.
Hombre afable, creativo, luchador y comprensivo que ha dado una gran contribución a la Iglesia Católica de Amazonas, a la educación y fundamentalmente a los yanomami, quiénes lo han reconocido como uno de los suyos. En su afán de inculturarse entre los yanomami, buscó un lugar que sirviera de apoyo y logística a los yanomami del río Mavaca, así surgió el pueblo de Mavaquita.
HOY TOCA A AMAZONAS DARLE LA DESPEDIDA TERRENA EN LA CATEDRAL DE PUERTO AYACUCHO, PERO SU VIDA Y ESPÍRITU DE SERVICIO VIVEN PERMANENTE CON ÉL, QUIÉN SE HA COLOCADO AL OTRO LADO DEL CAMINO, COMO DECÍA SAN AGUSTÍN.
JUAN BERNARDO FINKERS SANDERINK DESCANSA EN LA PAZ DEL SEÑOR Y SU TRABAJO ENTRE LOS YANOMAMI ES UNA LUZ QUE ILUMINA LOS CAMINOS DE AMAZONAS.
Había ingresado a la Congregación Salesiana el 15 de agosto de 1943 en el Noviciado de Ogchelen (Holanda). Allí mismo hizo su primera profesión el 16 de agosto de 1944 y permeneció allí por diez años, hasta 1954 y luego pasó a Assel (Holanda) hasta 1963 cuando vino a Venezuela, directamente a la Isla de Ratón (hoy El Carmen de Ratón) capital del Municipio Autana donde permeneción desde septiembre de 1963 hasta 1971.
Luego vino una etapa muy especial de su vida, su servicio a los yanomami en el Alto Orinoco, en el antiguo Territorio Federal Amazonas y que luego en 1992 pasó a ser el Estado Amazonas.Entre los yanomami estuvo de 1971 hasta el 2008. Durante 37 años vivió con intensidad su servicio como educador, comunicador de la fe e investigador. Escribió un libro sobre la alimentación yanomami, lo cual ha sido una contribución a la generación de conocimientos sobre los pueblos indígenas de nuestra región.
Hombre afable, creativo, luchador y comprensivo que ha dado una gran contribución a la Iglesia Católica de Amazonas, a la educación y fundamentalmente a los yanomami, quiénes lo han reconocido como uno de los suyos. En su afán de inculturarse entre los yanomami, buscó un lugar que sirviera de apoyo y logística a los yanomami del río Mavaca, así surgió el pueblo de Mavaquita.
HOY TOCA A AMAZONAS DARLE LA DESPEDIDA TERRENA EN LA CATEDRAL DE PUERTO AYACUCHO, PERO SU VIDA Y ESPÍRITU DE SERVICIO VIVEN PERMANENTE CON ÉL, QUIÉN SE HA COLOCADO AL OTRO LADO DEL CAMINO, COMO DECÍA SAN AGUSTÍN.
JUAN BERNARDO FINKERS SANDERINK DESCANSA EN LA PAZ DEL SEÑOR Y SU TRABAJO ENTRE LOS YANOMAMI ES UNA LUZ QUE ILUMINA LOS CAMINOS DE AMAZONAS.
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